¿Todavía haces abdominales clásicos?

¿Sabes que puedes sustituirlos  por los abdominales hipopresivos?

Por Feli Gómez, maestra de Reiki, fisioterapeuta especializada en suelo pélvico y gimnasia abdominal hipopresiva.

Precisamente para ello se crearon.

Todavía está extendido en la práctica del deporte que los abdominales clásicos son los virtuosos para trabajar la musculatura abdominal, eliminando así lumbalgias, perdiendo barriga y cintura, etc. Pues es necesario explicar que nada más lejos de la realidad. No solo no van bien sino que pueden lesionar esas estructuras que se cree que machacando con abdominales se mejoran. Empeoran problemas de espalda, provocan hernias abdominales, inguinales y peor aún, lumbares. Por qué? Por las presiones que se producen en la zona, que aunque son fisiológicas, mal gestionadas son lesivas.

Si el objetivo es mejorar el perímetro del abdomen, deshaciendo esa grasa acumulada, es mejor recurrir a ejercicios cardiovasculares, movilizando todo el cuerpo, produciendo un mayor gasto energético, favoreciendo así la eliminación de esa grasa acumulada entre piel y músculo, complementando el trabajo muscular abdominal con los hipos.

Ya expliqué en un post anterior, el funcionamiento de las presiones y las paredes que componen el abdomen cuando expliqué los abdominales hipopresivos. Ellas son las que se pueden ver afectadas, en función de su estado de salud.

Daré una pincelada sencilla. Imaginar el abdomen como un globo lleno de agua. Ese globo tiene una pared superior: el músculo diafragma, una pared inferior: suelo pélvico (porque llega la hiperpresión a la pelvis), una pared anterior, correspondiente a la musculatura abdominal y por último la pared posterior, con la musculatura toraco-lumbar.

Imagina que aprietas el globo ejerciendo fuerza con las manos arriba y abajo hacia el centro, hacia dónde se va el agua de su interior? Exacto, hacia los lados. Y si ahora aprietas como haciendo un ocho, hacia donde se va el agua? Efectivamente, hacia arriba y abajo. Hasta ahí bien, porque ese es el buen comportamiento de la presión que se ejerce en el interior de forma fisiológica, siempre que las cuatro paredes mencionadas estén sanas y en perfecto estado. Qué ocurre si una o más paredes están debilitadas, lesionadas, etc, pues que esa pared o paredes no podrán soportar la presión que se les viene encima una y otra vez y, como su acción es constante, llegará un momento que claudicará. Cómo? Con afectación diafragmática (respiratoria), ya que es el músculo responsable de al menos el 80% de la función respiratoria. Hernias abdominales y/ o lumbares y prolapsos (caída de órganos de la cavidad pélvica hacia el canal vaginal). Vosotros podéis estar tranquilos, no los padecéis ya que no tenéis vagina. Sí hay un  buen porcentaje de hernias inguinales, bueno, también en mujeres. No nos escapamos.

Qué producen los mecanismos lesionales citados anteriormente?: las hiperpresiones. El aumento de presión que se produce en esa pared o paredes que hemos comentado, que no tiene la facultad de soportar la propia presión fisiológica que cohabita en la esfera abdómino-pélvica. Ufff! Espero haberme explicado!

Entonces, por qué se les llama gimnasia abdominal hipopresiva? Porque disminuye dichas presiones intraabdominales. Cómo? Con una postura que permite el correcto esquema corporal, acompañado de una manera concreta de apnea diafragmática, que durante su ejecución disminuye dichas presiones interiores, favoreciendo que la musculatura de la faja abdominal natural trabaje al máximo de su capacidad, descompresionando o manteniendo la salud de las estructuras anteriormente mencionadas. Si eres mujer, tengo una gran noticia para ti: la práctica hipopresiva reduce y/o elimina prolapsos de hasta segundo grado. Si  no sabes lo que es: me alegro!!!

A todo esto, retomo el título del escrito. Si quieres trabajar musculatura abdominal y lumbar, hazlo con este método, sin lesionar ni sobrecargar la espalda, sobre todo articulaciones vertebrales y sus discos intervertebrales. Los estudios y la práctica demuestran que tan solo levantando la cabeza unos centímetros al ejecutar un abdominal clásico, dispara la presión que se produce en el interior de la cavidad abdominal y pélvica. El esfuerzo de levantar el tronco contra gravedad, favorece múltiples mecanismos lesionales y a qué precio? Quieres seguir pagándolo? Te propongo una prueba sencilla. Colócate en la posición clásica de abdominal (boca arriba y pierna flexionadas, elevando tronco) y observa desde el primer centímetro si empujas por ejemplo la pared abdominal hacia fuera. Eso es hiperpresión! Y si eres mujer, observa si también empujas hacia abajo tu suelo pélvico. También lo es!. Tengo la obligación moral de hacer un alegato de defensa de dicha técnica, ya que, dada su complejidad, no funciona y es contraproducente hacerla sin supervisión personalizada y profesional, ya que se ofrece como clases grupales directamente, sin respetar las fases de su protocolo:

            INTEGRACIÓN: 5 sesiones individuales supervisadas por un profesional cualificado

           MEMORIZACIÓN: diez sesiones en grupos reducidos donde dicho profesional sigue con las correcciones que cada asistente necesita durante toda la sesión

            AUTOMATIZACIÓN: ejecutarlos diariamente en casa durante unos 15-20 minutos durante al menos seis meses.

Sobre todo y por favor, si no haces este protocolo no estás haciendo hipos. Una apnea de “demo” sin una correcta postura tampoco es hipo. No entiendo el empeño de desvirtuar una gran técnica rehabilitadora y, que con todos los respetos, cualquiera sin formación crea que puede enseñar. Que no sea por falta de información. Seamos exigentes.

Dicho lo cual y para concluir, mencionar a su creador y las virtudes de la técnica.

En primera instancia, Marcel Coufrier quería cubrir con alguna técnica la hipotonía (bajo tono muscular) que quedaba en la musculatura del suelo pélvico femenino tras el parto, sin recurrir a las clásicas abdominales por ser tan?… Siii  hiperpresivas! (¡aplauso!) (porque aumentan la presión) y de ahí llamarlos hipopresivos (disminuyen dicha presión).

Los diferentes estudios que fue realizando le permitieron descubrir, que además de disminuir la presión que se produce tanto en abdomen como  hacia la pelvis, también descubrió otras virtudes tanto para hombres como para nosotras.

La práctica habitual de la gimnasia abdominal hipopresiva te permite:

  • Reducir/eliminar lumbalgias de repetición
  • Reducir/mejorar incontinencias
  • Eliminar prolapsos hasta grado II
  • Compensar deportes de impacto, sobre todo en mujeres
  • Mejorar parámetros respiratorios
  • Mejorar la postura  y la propiocepción
  • Aumentar/normalizar el metabolismo
  • Mejorar el tránsito intestinal
  • Mejorar el tono muscular global
  • Mejorar la diástasis (hernia) abdominal
  • Evitar hernias
  • Reducir el perímetro de la cintura

Para concluir, apuntar que con cada postura que aprendes y practicas movilizas músculos diferentes, permitiéndote realizar un trabajo muy global.

Si te seduce la técnica y tienes alguna duda, ponte en contacto con nosotras.

¡Regálate y regala salud!

Por Feli Gómez, maestra de Reiki, fisioterapeuta especializada en suelo pélvico y gimnasia abdominal hipopresiva.